El papa Francisco aparece por sorpresa en la basílica de San Pedro para observar las obras de restauración
- El pontífice bajó a la basicilia en silla de ruedas y con aparato de soporte respiratorio
- El miércoles, mantuvo una corta reunión con los reyes británicos Carlos III y Camila, de visita oficial a Italia
El papa Francisco, aún convaleciente tras padecer una infección respiratoria, ha aparecido por sorpresa en la basílica de San Pedro para observar los resultados de la restauración de la zona de Cátedra y saludar a los restauradores. Posteriormente, ha tenido tiempo para detenerse a rezar en la tumba de san Pío X.
El pontífice ha bajado a la basílica al final de la misa que se celebra cada mediodía para saludar y agradecer a los que todavía estaban trabajando antes de presentar las obras el viernes a la prensa, según ha informado la agencia ANSA.
El papa, en silla de ruedas, ha entrado en la basílica por la Puerta de la Oración, la más cercana a la Casa Santa Marta, donde se encuentra pasando la convalecencia después de haber sido dado de alta tras 38 días ingresado.
El miércoles también atendió por sorpresa la visita de los reyes británicos Carlos III y Camila, que se encuentran de viaje en Italia, a pesar de que la audiencia oficial se había cancelado debido a la salud de Francisco.
En una foto difundida a los medios, se mostraba a Francisco sin las cánulas nasales con el oxígeno y en su apartamento, mientras estrechaba la mano de la reina Camila. La reunión duró unos 20 minutos, según fuentes oficiales del Vaticano.
Francisco ya apareció el pasado domingo al final de la misa del Jubileo de los enfermos para dar una bendición y saludar a los fieles.
La presencia del pontífice emociona a los creyentes
Los gestos inesperados del pontífice, como la visita a la basílica de San Pedro, han provocado la emoción de quienes se encontraban en ese momento en el recinto. Francisco se encontró a un centenar de fieles muy emocionados que acudieron a saludarlo y ser bendecidos, según el portal Vatican News.
El papa bendijo a varios niños y a grupos enteros de peregrinos que han viajado a Roma con motivo del Jubileo. También se detuvo con algunos restauradores que estaban trabajando en las obras. Dos de ellos se mostraron "muy entusiasmados" por la visita y el pontífice los elogió por su trabajo.
Luego preguntó a los restauradores cómo se vivía estos días en la basílica, aún más concurrida a causa del Jubileo, según ha explicado la agencia italiana Ansa.
“Demasiada emoción, mi visión se nubló por las lágrimas y ni siquiera pude tomar una foto”, ha señalado a los medios vaticanos monseñor Valerio Di Palma, canónigo de San Pedro, tras ver la silla de ruedas con el papa empujada por el asistente sanitario personal, Massimiliano Strappetti.
Una Pascua con la participación del papa en el aire
La Iglesia Católica inicia este domingo su semana más activa del año con la cuenta regresiva para la Pascua, pero el Papa Francisco permanece fuera de la vista pública. Los médicos vaticanos le han prescrito al pontífice de 88 años dos meses de reposo para permitir que se recupere por completo, lo que significa que podría pasar gran parte o toda la Semana Santa fuera de la vista del público.
El papa normalmente preside al menos ocho ceremonias en el Vaticano durante la Semana Santa, que culminan con la Misa del Domingo de Pascua, cuando decenas de miles de personas acuden a la Plaza de San Pedro para celebrar el día en que creen que Jesús resucitó de entre los muertos.
Las autoridades del Vaticano aún no están seguras de si Francisco intentará hacer breves apariciones o participar en algunos eventos a través de una videoconferencia.
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