Los domicilios con empleadas del hogar deberán evaluar los riesgos laborales para las trabajadoras antes de noviembre

La visita al domicilio no tendrá por qué ser necesaria

Asimismo, han indicado que esta herramienta facilita el conocimiento sobre qué equipos de protección individual se deben proporcionar y las características que deben reunir los equipos de trabajo que pongan a disposición de estas trabajadoras. También resuelve la obligación de informar a las personas trabajadoras, a las empleadas del hogar, sobre los riesgos de su puesto de trabajo y cómo prevenirlos.

Con respecto a la forma de proceder de Inspección, la ministra de Trabajo ha indicado que se realizarán actuaciones, pero al igual que en otras intervenciones, no siempre es necesaria la visita al propio domicilio. Por tanto, se puede requerir la información o pedir las evaluaciones sin acceder al domicilio a través, por ejemplo, de entrevistas con las personas trabajadoras o empleadoras. Si se necesitase acceder al hogar, Inspección tendrá acceso al hogar con el permiso del titular.

Especial foco en las mujeres

Díaz ha puesto especial foco en las mujeres contratadas en estas labores, ya que muchas de ellas trabajan en el sector "no por un privilegio, sino por necesidad". "Y a ellas también les decimos hoy que también no están solas. Esta herramienta también está hecha pensando en ellas. Y esto, como digo, no es un castigo. No es que les pongamos más trabas administrativas. Es justamente lo contrario. Es un apoyo. Es seguridad jurídica. Es acompañamiento público", ha asegurado.

De este modo, la vicepresidenta ha explicado la relevancia de la norma, que afecta a "una parte esencial de nuestra sociedad", con más de 348.000 de mujeres afiliadas. Según fuentes del ministerio, el 80% de ellas tiene más de 40 años y el 69% tiene origen extranjero o doble nacionalidad. Además, cerca de 38.000 trabajan como internas, muchas de ellas sin un horario claro ni intimidad. Su salario medio ronda los 1.014 euros al mes, como matizan estas mismas fuentes.

La titular de Trabajo ha celebrado que la herramienta esté lista con dos meses de antelación, aunque ha reconocido que quedan "muchas tareas pendientes", como el protocolo frente al acoso y la violencia en el trabajo doméstico en el que ha dicho que están trabajando "duramente", así como la guía técnica en materia de prevención.

Sanciones en caso de incumplimiento

Por otro lado, han advertido que se trata de una herramienta obligatoria y esto se aplica durante los seis meses después de este miércoles. Por tanto, los hogares con empleadas del hogar tendrán hasta el 14 de noviembre para evaluar los riesgos laborales de estas trabajadoras. En caso de incumplimiento, han advertido de que habrá sanciones que podrán ser leves, graves o muy graves.

Los expertos que han desarrollado la herramienta han expuesto que, además de las tareas propias del trabajo, recoge el trato con mascotas o los trabajos en régimen y a turnos. "Lo que hay que hacer es indicar las tareas que realizan las personas que trabajan en nuestro hogar y a partir de aquí el sistema automáticamente genera un cuestionario específico de evaluación de riesgos específico para nuestro hogar", han apuntado.

Asimismo, han destacado que, en el momento de desarrollar el cuestionario, cuando se detecta algún riesgo, el empleador tendrá que llevar a cabo una acción para corregirlo y en un plazo determinado. "Tendremos que indicar qué es lo que se va a hacer para solventar esta situación y también quién va a ser la persona responsable y sobre todo un plazo en el que nos tenemos que comprometer a llevar a cabo esa subsanación o esa mejora", han recalcado.

Por último, han precisado que "lo más habitual" es que las medidas no tengan coste, ya que "la mayoría de ellas afectan a la propia organización del trabajo". Al finalizar el cuestionario, la herramienta va a generar un informe, en el que aparecerá la evaluación de riesgos y la programación de las medidas correctoras, todo ello con el plazo en el que se van a subsanar. Esta documentación va a estar a disposición de la parte empleadora y las trabajadoras, que dispondrán de una copia.